viernes, 29 de julio de 2016

La Política Educativa hacia el Siglo XXI:


Introducción. 

    Tal como se determina en los términos de referencia, el propósito general del presente trabajo consiste en “Identificar las principales características que estuvieron en la base de la formulación de la Política Educativa Hacia el Siglo XXI”, vigente desde el 8 de noviembre de 1994. Se enfatizará en los cambios propuestos para la secundaria (enfoque pedagógico, innovaciones en el currículo, características del tipo de estudiante que se pretendía para secundaria en materia de destreza y habilidades). Además y de acuerdo con los términos de referencia.


Objetivos.


General. 
Convertir la educación en el eje del desarrollo sostenible.
  1. Cerrar las brechas existentes entre la calidad de la educación que reciben los estudiantes de las áreas urbanas y rurales, y eliminar la diferenciación entre las instituciones educativas de las áreas urbanas marginales y no marginales.
  2. Formar recursos humanos que eleven la competitividad del país, necesaria para triunfar en los mercados internacionales.
  3. Fortalecer valores fundamentales que se han ido perdiendo con el pasar del tiempo.

Específicos. 

  •  Se explicará el proceso de construcción de dicha Política: sus fundamentos, contenidos, características y particularidades en comparación con otros países de Región.
  •   Se determinará la forma como finalmente la Política se concretó, precisando sus alcances y los principales pendientes desde su aprobación. 
  • Se explicitarán las principales transformaciones propuestas y las críticas que se emitieron desde diferentes ámbitos.
  •  Se precisarán los principales cambios que se buscaba promover para la educación secundaria, definida ésta como los años comprendidos por el tercer ciclo y el cuarto ciclo, o ciclo diversificado, desde el punto de vista de variedad de la oferta educativa, el curriculum y la evaluación de aprendizajes.


1. Proceso de construcción de la Política Hacia el Siglo XXI: sus principales contenidos, fundamentos, características y particularidades. Comparación con otros países de Región.


     La Política Educativa hacia el Siglo XXI, constituye un innovador esfuerzo por establecer un marco de largo plazo para el desarrollo del Sistema Educativo Costarricense, que permite adecuar el mandato constitucional a la realidad específica de nuestros días.

Fue aprobada por el Consejo Superior de Educación en sesión Nº 82-94, el 8 de noviembre de 1994 y presentada a ese Consejo, por el entonces Ministro de Educación señor Eduardo Doryan.
   El marco jurídico de la Política Educativa hacia el Siglo XXI, lo constituye la Constitución Política de Costa Rica y la Ley Fundamental de Educación.

El contexto político-económico internacional 
     Tal como lo indican Chavarria, Paniagua y Quesada (1998) al momento de presentarse la Política Educativa en 1994, y desde que discutía a lo interno de la Comisión de Educación en la etapa pre-elección presidencial, el mundo se enfrentaba a un cambio paradigmático que se evidenciaba en tres dimensiones: la económica, la ecológica y la científico-tecnológica. De una economía que no tomaba en cuenta el aprendizaje humano como centro de desarrollo se emigró hacia una en la que la persona humana y su conocimiento son ejes esenciales en el desarrollo de una nación. El Muro de Berlín había caído, se consolida la Unión Europea como bloque con poder económico-político y tienden a conformarse alianzas comerciales estratégicas como la de Canadá-Estados Unidos-México y la de la cuenca Asiática-Pacífica. Así entonces, de una economía por dominada por una sola potencia se había pasado a una economía de bloques de países con intereses comunes.
     La “globalización” para unos o “mundialización” para otros había llegado para quedarse. Como intercambio comercial y nuevas formas de interacción entre países se percibió como un fenómeno novedoso. Sin embargo, y como bien lo apunta Huamán 
     La globalización no se inicia en nuestra era: tiene antecedentes remotos y distintas manifestaciones históricas, la modernidad y la modernización son su prefacio y su expresión. Miguel León Portilla define al encuentro entre América y Europa “como el máximo proceso de globalización del planeta”, el descubrimiento del Nuevo Mundo conmueve y convulsiona la concepción del mundo ya conocido, la ampliación del espacio físico altera la concepción del tiempo histórico, el encuentro con el indígena cuestiona la propia identidad europea, la conquista y colonización española, junto a las revoluciones por la independencia con la influencia de la revolución francesa, fueron en ese tiempo expresiones de globalización.
c) El escenario nacional
 Como ya se ha indicado, la propuesta de política educativa que con la dirección del Dr. Eduardo Doryan promovió la “Comisión de Programa de Gobierno 1994- 1998”, fue una respuesta al panorama internacional predominante. El 1 de octubre de 1993, con base en las conclusiones del Congreso Educativo del Partido Liberación Nacional de 1992, el entonces candidato presidencial José María Figueres, presenta e invita “a los educadores y ciudadanos preocupados por una transformación de la calidad de la educación nacional” para que participen en la discusión del primer documento precursor de la política educativa: “La Transformación de Calidad de de la Educación Nacional: Notas para la discusión.”
La política educativa vigente en el Sistema Educativo Costarricense se sustenta en el acuerdo tomado por el Consejo Superior de Educación en noviembre de 1994, en el marco estratégico denominado "Política Educativa hacia el Siglo XXI", la cual en sus principios básicos propugna fomentar el desarrollo integral del ser humano en un plano de igualdad de oportunidades. Se trata de una visión de largo plazo, con ideales de excelencia académica y pertinente con las demandas de la realidad nacional. Se trata, también, de una respuesta al contexto económico marcado por la globalización y de una propuesta sostenible y equitativa que atiende los retos y pretende cerrar las brechas de la educación costarricense. En este contexto, las acciones estratégicas impulsadas por el Ministerio de Educación en la Administración 1994-98 apuntaron a: i) la universalización de la educación preescolar; ii) el mejoramiento de la calidad de la educación básica, que considera el fortalecimiento de la enseñanza de lenguas extranjeras en primaria y secundaria; iii) el programa de informática educativa; iv) el mejoramiento de la calidad de la educación y vida en las comunidades urbano-marginales y en las escuelas unidocentes; v) el suministro básico educativo (cobertura de seguro médico por la CCSS, becas, comedores escolares, útiles y uniformes escolares) para aumentar la retención de los estudiantes; y vi) la educación ambiental y en desarrollo sostenible; y vii) el fortalecimiento de la educación técnica, entre otros. 

En 1996, el Poder Ejecutivo sometió a conocimiento de la Asamblea Legislativa los Proyectos de Ley de Fundamentos y Garantías para el Desarrollo y Mejoramiento continuo del Sistema Educativo Nacional y el Proyecto de Reforma al Artículo 78 de la Constitución Política, los cuales tuvieron por objetivo establecer la base legal para la ejecución de una política educativa estatal que asegurara y garantizara el desarrollo y mejoramiento del Sistema Educativo Costarricense con una visión de Política de Estado, con sostenibilidad financiera y tecnológica. Por ello, con la Reforma al Artículo 78, pretendió garantizar constitucionalmente una asignación de un 6% del PIB para la educación.

 De ambos proyectos de ley, solamente el segundo fue aprobado. Reformas a la Educación Secundaria fueron propuestas desde el punto de vista de la diversidad de la oferta, la amplitud de la cobertura, el diseño de estrategias de retención estudiantil, el enriquecimiento curricular y las normas y criterios de evaluación de los aprendizajes en general y de las pruebas de tercer ciclo y bachillerato, en particular .

a) La necesidad de una Política Educativa: 

Se establece la necesidad de un replanteamiento de la concepción del mundo, ante los grandes desequilibrios creados por el único objetivo del crecimiento económico, los cuales ponen en peligro la sobrevivencia de la persona humana. Evidencia la necesidad de establecer una “ética del desarrollo” que promueva el equilibrio entre el desarrollo, la sociedad y la sostenibilidad del medio ambiente. Exige la recuperación de la academia como centro de investigación y de exploración, como el espacio colectivo que permite el diálogo y el nacimiento del pensamiento. Se considera de vital importancia profundizar en la cultura costarricense como fundamento de la identidad nacional y elemento medular para que los protagonistas encuentren el sentido de su existencia. Se identifican una serie de necesidades que incluyen: infraestructura, baja escolaridad, deterioro de las condiciones laborales y salariales del docente, pérdida de credibilidad profesional y agotamiento del modelo educativo como tal. La educación se concibe como el instrumento fundamental para insertar al país ante un cambio de paradigma en la visión de mundo de frente al siglo XXI. 



b) El contexto de una Política Educativa: 

Está conformado por la Ética del Desarrollo; la Política Social y el Marco Jurídico de la Educación Nacional. Cuatro ejes definen a la Ética del Desarrollo: la sostenibilidad ambiental; la del recurso humano; la social y política y la económica y productiva. Estos ejes, a su vez, se articulan con cuatro retos (ya mencionados) a saber: económico, social, ético y ecológico.

La Ética del Desarrollo se entrelaza con la educación debido a que su puesta en práctica implica la formación de ciudadanos con características particulares, entre las cuales se destacan, entre otros: la solidaridad; el respeto por el entorno físico personal y el social; el manejo inteligente de sus recursos económicos. 

La Política Social: Se concibe a la educación como el instrumento que elimina las inequidades existentes en términos de desarrollo. Se visualiza como la “visagra” que une las necesidades sociales con las demandas y restricciones económicas, lo que impulsaría una mejor formación de los recursos humanos y por ende la generación de mejores oportunidades salariales y de mejores condiciones de vida.


c) Fundamentos filosóficos y teóricos: 

Se señalan y explican como fuentes filosóficas de la Política Educativa el Humanismo, el Racionalismo y el Constructivismo. El humanismo se percibe como el “Para qué se aprende.” Parte de la toma de conciencia que permite el conocimiento de la globalidad y de la persona como ser integral, con una visión responsable del futuro. Implica la internalización de valores de solidaridad con las generaciones futuras con base en los valores de generaciones pasadas; así como la aceptación de que las diferencias superficiales o profundas entre seres humanos no pueden conducir a ningún tipo de discriminación. Significa, además, el desarrollo en el ser humano tanto de la pasión por la verdad, por la justicia, la estética y la solidaridad como la búsqueda de un equilibrio entre la diversidad cultural y étnica de la h humanidad y la diversidad biológica del planeta.

El Racionalismo se conceptúa como el “Qué se aprende.” De cara al siglo XXI, lo académico debe ser considerado como el espacio para la reflexión y la construcción sistemática y rigurosa del conocimiento mediante la investigación, la experimentación y el diálogo productivo. Con ello se procura que los actores de esta Política Educativa desarrollen el razonamiento y la facultad de conectar ideas, consciente, coherente e intencionalmente, mediante procesos de mediación activos. 

El Constructivismo constituye el “Cómo se aprende.” Parte del concepto de la psicología genética de que ningún conocimiento es transmitido, sino reconstruido, internamente por el sujeto. En otras palabras, el sujeto no tiene otra posibilidad de conocimiento más que actuando sobre el sujeto-objeto para establecer un diálogo que permita construir y reconstruir el conocimiento, dentro del contexto social y cultural de referencia del sujeto. Se aclara que esta acción debe: tener intencionalidad, alimentarse por los contenidos de cada disciplina, ser sistematizada y rigurosa, conducir a la construcción de productos mentales y físicos y favorecer la correlación y convergencia entre las disciplinas, dentro del marco conceptual de la Política Educativa. 

d) La práctica de la Política Educativa: 

Se explicita la relación que debe existir entre la práctica y las fuentes filosóficas y teóricas que la sostienen. Se la define compuesta por: los planes y programas; la formación, capacitación y educación continua del educador; la evaluación; los recursos didácticos, la mediación docente; y la Intermediación gerencial.. A continuación, una breve explicación de los componentes enumerados.

Planes y programas:Son una guía de la mayor relevancia para el docente, la cual, le permite planificar su mediación en forma coherente con los principios filosóficos de la Política Educativa, la evaluación y los recursos didácticos. A la vez, podrá detectar sus propias necesidades de formación. Se sugieren acciones de procesos relacionados entre dos o varias asignaturas a efectos de impulsar soluciones multi y transdiciplinarias a problemas identificados. Se sugiere una posible estructura programática que incluye: objetivos, contenidos, relación temporal, experiencias y estrategias de aprendizaje y evaluación. 

Formación, capacitación y educación continúa del educador:

 Se concibe al educador como la figura clave de la transformación de la educación costarricense y, por tanto, la búsqueda y concreción de un ideal de educador se fundamenta en los planteamientos señalados por la Ética del Desarrollo. Así entonces, se busca conciliar las necesidades e intereses de los docentes con los de la educación misma. Se propone, de este modo, mantener un proceso de transformación de un educador cada vez más flexible, más conocedor de las disciplinas; más hábil para dar soluciones integrales a los problemas inherentes a la mediación pedagógica, la interacción con los estudiantes, con las familias y con la comunidad. 


Evaluación: 

Se conceptúa en sus tres funciones: diagnóstica, formativa y sumativa. En su función diagnóstica, se percibe como una herramienta que permite caracterizar la situación actual de las necesidades de aprendizaje de un estudiante, de un proyecto o de un programa. Como herramienta formativa, se considera un instrumento fundamental para la acción correctiva en el proceso de aprendizaje, o de desarrollo de un proyecto o programa, por cuanto ofrece la retroalimentación necesaria para establecer ajustes y medidas correctivas. La sumativa, permite valorar el resultado o el producto final y de esta manera, tomar decisiones futuras con base en resultados concretos. Se enfatiza la relación que debe existir entre quien aprende, lo aprendido y la mediación docente en el proceso. Se sugiere la construcción de escalas para valorar desarrollo del estudiante y las pruebas, para la evaluación de los aprendizajes. Se propone no solo la microevaluación sino también la macroevaluación y la mesoevaluación para efectos de promoción y de certificación.

Recursos didácticos:

 Se plantean como objetos que permiten la construcción y reconstrucción del conocimiento, mediante la relación e interacción que el docente y los estudiantes susciten alrededor de dichos objetos en contextos significativos de aprendizaje.

Mediación docente:

 Se entiende como la focalización guiada de la atención del aprendiz hacia los estímulos esenciales de la situación de aprendizaje y del entorno en general. No se descarta ninguna estrategia pedagógica ni técnica didáctica en tanto sea significativa. Se promueve la creatividad del docente y se le refuerza su libertad profesional para que elija las estrategias y técnicas que considere pertinentes para las necesidades de los estudiantes, en el entorno particular en el que se desenvuelve.

IV Etapa: Difusión y distribución de la Política Educativa Hacia el Siglo XXI 

Aprobada la Política, el objetivo siguiente fue el de “devolverla” no solamente a quienes se habían interesado en retroalimentar el proceso, sino también en presentarla al Magisterio Nacional desde la base. Para lograr esta meta se implementó una tarea inicial concentrada entre noviembre de 1994 y febrero de 1995. 

Tal como lo atestiguan Arias, Fernández, Paniagua y Picado (2010) en sendas en entrevistas, se utilizaron los más diversos medios de difusión. En cuanto a material escrito, se publicó un resumen en los medios de comunicación masiva; el Centro Nacional de Didáctica elaboró un folleto guía de lectura, reflexión y aplicación de la Política Educativa que se distribuyó desde las Direcciones Regionales a los centros educativos.

 Una de las principales estrategias fue, sin embargo, promover talleres y foros de discusión en cada una de las Direcciones Regionales con la presencia no solamente de docentes; directores/as; asesores/as; supervisores/as; juntas de educación; patronatos escolares, sino también con representantes de gobiernos locales y otras organizaciones civiles. En dichos eventos se contaba con la presencia de alguna de las autoridades ministeriales y las personas encargadas de coordinar la escritura de la Política.

Uno de los eventos más significativos se llevó a cabo en el mes de febrero de 1995, en la Escuela Social Juan XXIII. Con el propósito de presentar y analizar la Política Educativa en general y los alcances de la coherencia entre los elementos prácticos de la Política y las fuentes filosóficas que los sustentan, en particular, por espacio de tres días se reunió a todos los asesores/as; supervisores/as nacionales y regionales. A cada participante se le entregó un paquete de filminas con la Política Educativa y cada uno de los aspectos prácticos aplicados a las fuentes filosóficas; para tal efecto se hizo una impresión de 4,500 filminas.

 Si bien la etapa más agresiva de difusión y distribución fue la descrita, los siguientes meses del año 1995 no fueron menos intensos con foros de discusión en las universidades públicas; en las sedes de las asociaciones magisteriales; en el Colegio de Licenciados y Profesores; y en la Cámara de Industria y Comercio. 

conclusión. 

La politica educativa hacia el siglo XXI constituye un innovador esfuerzo por establecer un marco de largo plazo para el desarrollo del sistema educativo costarricense que permite adecuar el mandato constitucional a la realidad especifica de nuestros días. 

Referencias bibliográficas

 Abrahams, Catalina; Araya, Jéssica; Gómez, Ana Elieth; Murillo, Gabriela; Solano, Floribeth (2001) Estudio acerca de la coherencia de enfoque teórico entre el Plan de Estudios de la carrera de Bachillerato en I y II Ciclos del Universidad de Costa Rica, en relación con la Política Educativa Hacia el Siglo XXI y su proyección en la labor de aula. Informe de Seminario de Graduación para obtener el grado de licenciatura en Educación Primaria. Universidad de Costa Rica, Facultad de Educación, Escuela de Formación Docente. 

Arias Ocampo, Ronald (2007) La Política Educativa y la Formación de Educadores (1994-2006). Avance, Resumen ejecutivo. Programa Estado de la Educación, CONARE.

Arríen, Juan B., et al.( 1998) , La educación y la reforma de la educación en cinco países centroamericanos (Managua: PREAL-UCA-Fundación Ford)